Resulta que los paparazzi pillaron a Miley el viernes saliendo de un club erótico donde los menores de 21 años tienen prohibida la entrada. Miley, con esta "pillada" metió la pata por partida doble: entrar en un club impropio para su edad donde además se ofrece alcohol.
Miley, como sabéis, aún tiene 18 años, así que no puede entrar en locales donde se consuma alcohol o donde se ofrezcan espectáculos subiditos de tono. Y el local elegido por Miley y sus amigos combinaba estas dos ofertas: alcohol y show erótico...
Así que el club en cuestión puede tener problemas por no comprobar la edad de Miley y permitirle la entrada.
Miley vuelve a reivindicar una vez más su papel de chica rebelde. ¿Qué piensas de esta actitud de Miley? ¿Está bien o está mal?
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